15 de enero de 2013

Un año más...

y yo sigo aquí. Aquí significa España, porque justo cuando todo el mundo se está quedando sin trabajo... yo no solo lo encuentro si no que encima lo conservo durante más de un año. Si creyera que existe el destino diría que tiene un sentido del humor muy curioso y más bien retorcido.
Si alguien lee esto puede pensar: ¿Y porque no te despides? Buena pregunta. Tengo razones familiares (hola, crisis) que no me dejan abandonar un puesto de trabajo bien pagado sin crearme un cargo de conciencia considerable. Si me echaran, en cambio... *cough*

Tampoco he desaprovechado este año. No he ahorrado una mierda, porque tengo agujeros en las manos... pero he aprendido inglés. O más inglés, al menos. Antes lo hablaba mal y lo entendia regular. Ahora lo entiendo perfectamente y puedo mantener una conversación. ¿Cómo? Me he leído mi propio peso (que es considable) en libros en inglés. Al principio no entendía nada, pero todo es acostumbrarse y tener un diccionario a mano. Ahora leo casi exclusivamente en inglés (y no necesito el diccionario), más que nada porque hay más donde elegir.

Y sigo pensando irme. Si es que la fantástica empresa para la que trabajo me echa antes de que cumpla los 30, claro...